Llegaste
silencioso a mí
endulzandome, con esas miel tuya
adherindome
sin tocarme.
Sonreí desganada
tú escribías
mientras tus pupilas recorrian mi ser
despacio
y un temblor frío
me hizo caer.
Desperté en ti
un extraño conocido
un conocido escritor.
Y sentí pasar el dolor persistente
aún
cuando lo veía de cerca.
Cerré los ojos
me hablaste al oído
despacio
no podía ver lo que decías
en mí
y callaste.
Entonces dijiste amor
y miré
tu guiño forzado/lindo
temblando
por el frío cálido que sentí
cerca
de tu blando corazón gastado.
Tiempo
lo que menos quieres
lo que más me hace falta
pero
esperas sentado frente a mí
solo
cuando llegue
llévame lejos.
PD: me da mucha risa este post, no sé porque, usualmente no escribo así, o sí? Lo hize escuchando Take me away de Lifehouse (la canción que está arriba :D) y pensando en alguien.
24.1.11
11.1.11
Háblame
Háblame
yo sé que sabes
que presientes que te quiero
hablar.
Háblame
dime cualquier cosa
lo de antes, lo de ahora
que me quieres
hablar.
Háblame
como sea
de cualquier forma
sólo dilo:
te quiero
hablar.
Háblame
maldita sea
sólo háblame ahora
yo sólo te quiero
hablar.
PD: últimamente no sé sobre que escribir, así que no es lo mejor que puedo dar. Ideas, tengo la mente en blanco!
yo sé que sabes
que presientes que te quiero
hablar.
Háblame
dime cualquier cosa
lo de antes, lo de ahora
que me quieres
hablar.
Háblame
como sea
de cualquier forma
sólo dilo:
te quiero
hablar.
Háblame
maldita sea
sólo háblame ahora
yo sólo te quiero
hablar.
PD: últimamente no sé sobre que escribir, así que no es lo mejor que puedo dar. Ideas, tengo la mente en blanco!
3.1.11
Un momento
Estabamos hechados sobre la hierba del parque. El sol estaba perfecto, no era ni muy fuerte ni muy mezquino. El viento acariciaba nuestras piernas y las nubes parecían mariposas. Aparentemente todo era perfecto.
Hize que Andrés estirara su brazo para apoyar mi cabeza y poder abrazarlo. Él me obedeció como una máquina programada y miraba fijamente el cielo, pensativo. Me recosté en su regazo y lo abrazé.
-¿Pasa algo, amor? -le pregunté.
-Nada Lore, todo está bien.
-Bueno.
Respiró profundamente, cerrando los ojos.
Yo lo miraba concentrada: como su pecho subía y bajaba, como un puñado de aire le daba motor a su existencia, como sus ojos se tensaban, como se resecaban sus labios por el sol.
-¿Lore? -dijo Andrés sin abrir aún sus ojos.
-Dime.
-Sigues sin querer eso, ¿no?
Me quedé pensando por un segundo, mirando como apretaba sus labios fuertemente.
-¿Qué de qué? -le respondí, haciendome la desentendida.
-Ya sabes pues, no te hagas la tontita, Lore -Me dijo alzando su cabeza y mirandome, alternando labios y ojos.
-Ya sabes la respuesta, Andrés.
-¿Hasta el matrimonio?
-Yo jamás dije hasta el matrimonio. Sólo que, aún no me siento segura.
-Lorena, amor, hay miles de formas de protección, te aseguro que no quedarás embarazada.
-No es sólo eso Andrés, es que...
-Tú nunca quieres nada. Estoy seguro que si él te lo hubiera pedido...
-¡Cállate! -le dije grité furiosa, levantándome. Una pareja de ansianos tomados de la mano que caminaba cerca, nos miraron.- Siempre es lo mismo, que Javier esto, que Javier el otro. Parece que estuvieras enamorado de Javier.
-La que está enamorada de Javier es otra.
-¡Eres un animal! ¡Me tienes harta!
-Sabía que esto no iba a funcionar.
PD: No todo es completamente cierto.
Hize que Andrés estirara su brazo para apoyar mi cabeza y poder abrazarlo. Él me obedeció como una máquina programada y miraba fijamente el cielo, pensativo. Me recosté en su regazo y lo abrazé.
-¿Pasa algo, amor? -le pregunté.
-Nada Lore, todo está bien.
-Bueno.
Respiró profundamente, cerrando los ojos.
Yo lo miraba concentrada: como su pecho subía y bajaba, como un puñado de aire le daba motor a su existencia, como sus ojos se tensaban, como se resecaban sus labios por el sol.
-¿Lore? -dijo Andrés sin abrir aún sus ojos.
-Dime.
-Sigues sin querer eso, ¿no?
Me quedé pensando por un segundo, mirando como apretaba sus labios fuertemente.
-¿Qué de qué? -le respondí, haciendome la desentendida.
-Ya sabes pues, no te hagas la tontita, Lore -Me dijo alzando su cabeza y mirandome, alternando labios y ojos.
-Ya sabes la respuesta, Andrés.
-¿Hasta el matrimonio?
-Yo jamás dije hasta el matrimonio. Sólo que, aún no me siento segura.
-Lorena, amor, hay miles de formas de protección, te aseguro que no quedarás embarazada.
-No es sólo eso Andrés, es que...
-Tú nunca quieres nada. Estoy seguro que si él te lo hubiera pedido...
-¡Cállate! -le dije grité furiosa, levantándome. Una pareja de ansianos tomados de la mano que caminaba cerca, nos miraron.- Siempre es lo mismo, que Javier esto, que Javier el otro. Parece que estuvieras enamorado de Javier.
-La que está enamorada de Javier es otra.
-¡Eres un animal! ¡Me tienes harta!
-Sabía que esto no iba a funcionar.
PD: No todo es completamente cierto.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)