4.7.11

7

Son cerca de la una de la madrugada
mis venas están infectadas de cafeína
y yo aún no termino de argumentarte.
Suena la canción ochentera
mis dedos se mueven rápidamente
parece que ya fuera octubre
y ya se me fue el sueño.
Son cerca de la una
de la madrugada de ese día más
que no fue otra en el que aquel veneciano latino explotó
Ese miércoles maldito en el que tuve que
aprenderme una lengua profana
para no perder la poca conciencia que me queda.
Suena una canción
mitad egocéntrica, mitad ególatra.
Y sigo sin sueño.
Es tarde
mañana hay una clase importante
y aún no termino de argumentarte.
Madre me preguntó si me sentí triste
por aqueña cita extraña/necesaria
que me dijeron esos blancos hombres.
No está preocupada por la cita
solo por mi debilidad mental.
Son la una
y suena una guitarra delirante.
Son la una y no me muero.

2 comentarios:

Andicé dijo...

me gustoo :)

Delphos dijo...

Muy bonito y casi poetico post, tanto que senti una sensacion de sutileza recorriendo mis venas, gracias.

Saludos